LAS CHICAS GILMORE
Esta es sin lugar a dudas mi
serie favorita. Ellas son las chicas Gilmore. Mis amigas, las que me han
acompañado durante muchos años, las que han creado anécdotas y diálogos
inolvidables, las que han hecho que mi prima y yo agonicemos por saber que va a
pasar después. Ellas son mis chicas Gilmore.
Amy Sherman-Palladino, la
creadora de la serie y una mujer sumamente extravagante, tuvo una idea para una
serie: una madre y una hija que son más amigas que otra cosa. A la Warner le
gustó la idea, y decidieron llevarla a cabo y ambientarla en el idílico estado
de Connecticut, en el ficticio pueblo de Stars Hollow. Lo primero que convenció
a los productores fueron los diálogos, esos locos diálogos que van a un ritmo increíblemente
rápido y que recuerdan a las Screwball comedys de los años 40, a esas películas
de Katharine Hepburn y Spencer Tracy.
La serie comenzó en el año 2000,
y desde el primer momento fue todo un éxito. Como ya he dicho la historia es
sobre una madre, Lorelai, y una hija, Rory, que en realidad es diminutivo de
Lorelai. Esta tuvo a Rory con 16 años y la llamó como ella; Lorelai siempre
dice que así su feminismo venció, pero Rory cree que los analgésicos tuvieron
algo que ver. La serie comienza cuando Lorelai se ve obligada a pedir dinero
prestado a sus padres para poder pagar el colegio privado de Rory, el cual
debería catapultarla a una brillante carrera universitaria en Harvard. La
relación de Lorelai con sus padres siempre fue mala, pero desde su prematuro
embarazo y desde que se independizó fue de mal en peor. La madre de Lorelai, la
estricta Emily, a cambio de prestarle el dinero instaura las “cenas de los
viernes”, para así recuperar a su hija y a su nieta. Este es el comienzo de las
7 temporadas que duró la serie, y el comienzo de una de las comedias dramáticas
más divertidas de la historia de la televisión.
Los personajes son todos
fantásticos, geniales, extravagantes, excéntricos… ni uno de ellos se libra,
todos tienes sus particularidades. Lorelai es impulsiva, alocada, sarcástica,
con una facilidad pasmosa para la verborrea y para ligar (la adoro, siempre ha sido
mi heroína); por el contrario, Rory es mucho más seria y centrada, en ocasiones
parece más la madre que Lorelai. Emily es una mujer un poco estirada, sin
embargo puede llegar a sorprendernos, y Richard, el padre de Lorelai es un hombre
tranquilo, centrado en su trabajo y en sus libros. La mejor amiga de Lorelai es
la cocinera Sookie, algo hiperactiva y con un gran corazón; y Luke, el dueño
del restaurante con el mejor café del pueblo, es el hombre más leal, misterioso
y antisocial que pueda haber, es directo, siempre dice lo que piensa (también
habría que decir que es muy sexy con sus camisas de leñador, su gorra y su
barba de 3 días). Lane, la mejor amiga de Rory, es coreana y adora la música,
más concretamente el rock, lo cual desconoce su madre, la ultraconservadora y
católica señora Kim.
No quiero enrollarme con los
personajes, hay muchos más y todos son únicos… lo que quiero decir es que la
serie está tan bien hecha, tú sientes que formas parte de ese mundillo, de Stars
Hollow, sientes que eres uno más; yo no soy una persona que haya deseado jamás
vivir en un pueblo, siempre he pensado que me aburriría, pero realmente no me
importaría vivir en Stars Hollow. Es imposible aburrirse allí, sientes la
necesidad de participar de todo ello, de la Maratón de Baile, de la subasta
anual de cestas de picnic, del Festival de pinturas vivientes, incluso a las ridículas reuniones del pueblo. Pasar el día bebiendo café, comiendo únicamente guarradas (especialmente las hamburguesas con patatas del Café de Luke) y viendo películas malisimas.
Realmente no es una serie para
adolescentes, aunque una de las protagonistas lo sea. Es una serie para todos
los públicos, conozco tanto hombres como mujeres que la adoran, es más, le puse
el primer capítulo a mi novio para ver si le gustaba y acabamos viendo la serie
entera, y solía decirme que ver las Chicas Gilmore después del trabajo siempre
le animaba. Es una serie que toca todos los temas posibles, el amor, la
amistad, el trabajo, los estudios, las complejas relaciones familiares… Es a
fin de cuentas una serie sobre la vida, aunque tal vez con una cantidad de
gente estrafalaria por metro cuadrado superior a lo habitual.
Sin duda es una de las mejores series que se hayan creado. Personajes complejos, coherentes y desternillantes. Tramas que se complican y dan mil vueltas, pero al fin y al cabo igual que en la vida real. Me quedo con los mil y un trabajos de Kirk y con las conversaciones Lorelai-Rory. O con los desplantes a Emily, con las palomitas y películas, las tradiciones extrañas instauradas en la casa Gilmore, con Luke... no sé con qué quedarme, ¡tal vez sea hora de empezar a verla por enésima vez! ¡Gran review, pajara!
ResponderEliminarGracias pajaro! Yo también tengo ganas de verla otra vez... y no lo descarto =)
ResponderEliminaryo la descubri en la tele el verano pasado y la he empezado a ver con mi hija¡¡¡¡¡ Nos encanta, yo quiero vivir alli
ResponderEliminarEs una serie genial, sobre todo para los momentos madre e hija. Gracias por comentar
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